Volvió el hincha después de la pandemia
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- Publicado: Martes, 10 Mayo 2022 17:04
Nota de Opinión: Por René Paz.
El fútbol de la Liga Santiagueña volvió a su antiguo canal de comunicación entre los hinchas y los clubes, pese a la adversidad de la cruda realidad económica de nuestro país. Falta únicamente observar la fecha de los clásicos para darnos cuenta, que el público volvió a las canchas después de dos duros años de pandemia, y el regreso fue de la mejor forma.
Más allá del fútbol profesional que impone Central Córdoba en la Liga Profesional, y Güemes y Mitre en la Primera Nacional, el fútbol de entrecasa volvió a tener el protagonismo necesario, después de mucho tiempo.
Las siete canchas del domingo estuvieron colmadas. Los clásicos de Huaico Hondo, de La Banda, de Beltrán y de Fernández se llevaron las mejores recaudaciones, donde se extrae un valor importante como es el apoyo del hincha, el ADN perfecto del ser humano. Unión Santiago- Güemes, Villa Unión- Agua y Energía y Defensores Clodomira tuvieron también un marco adecuado, ya que la fecha comenzó el viernes en La Banda con los partidos entre Instituto-Yanda y Vélez- Banfield, y finalizó ayer a la tarde con el clásico mayor entre Mitre- Central Córdoba en el Barrio 8 de Abril, único encuentro que no se jugó con público.
Las dos primeras fechas del “Alfredo Moreno” tuvieron también muy buena respuesta del público, y eso les permitió a los clubes comenzar de la mejor manera (con oxigeno económico). Es verdad que se perdieron dos categorías (2003 y 2004) por la pandemia, pero los clubes hicieron enormes esfuerzos para ponerse de píe, abrir las puertas y jugar con seis categorías, incluyendo inferiores, que en el 2022 tendrá algo más de 850 partidos en las cuatro categorías con nueve meses de competencia, donde en marzo se terminó el Transición donde jugaron los clubes que podían hacerlo. De a poco, y con mucho esfuerzo dirigencial, los clubes volvieron a caminar, mirando y apoyando las formativas.
La primera división y el Sub-19 tienen 20 clubes a full. En plena competencia con un torneo atractivo que depositará a dos representantes al Torneo Regional 2022-23 que dará comienzo en septiembre. Volvió Clodomira y eso es un buen síntoma en todo sentido, y lo hizo en seis divisiones, combinando mucha imaginación dirigencial con el regreso del hincha “Canario”. Lo mismo sucede con Yanda FC, que en el proyecto que Héctor Ayuch representa volvió a darle rodaje a muchos chicos que conforman sus juveniles planteles de primera y sub-21, algo similar que sucede en muchos casos, como en Instituto Santiago, Villa Unión, Vélez de San Ramón, Comercio, Agua y Energía, Central Argentino, Banfield e Independiente de Fernández, que apostaron al semillero para la continuidad de un proceso.
Hay dos equipos más que tienen sus plazas en el Regional como el “Profe” bandeño y Unión Santiago (los dos punteros en sus respectivas zonas), y los dos apostaron al campeonato, a buscar la vuelta olímpica en el orden local, y conformaron buenos planteles, con refuerzos de nivel incluido, algo parecido a Estudiantes de Huaico Hondo, que “tiró la casa por la ventana”, y buscará una plaza para el certamen nacional. Por su parte, Independiente de Beltrán, Sportivo Fernández, Defensores de Forres y Unión de Beltrán buscan protagonismo, con la idea fija de concretar una buena campaña, donde el hincha también se ilusiona con un campeonato.
El problema de otras temporadas eran los clubes que jugaban a nivel nacional, que siempre hacían retrasar los partidos y por ende el campeonato. Ahora Central Córdoba, como Mitre y Güemes juegan también los fines de semana, ya que se adaptaron a la necesidad de los clubes locales y los tres apostaron a planteles juveniles para darle rodaje a los futuros jugadores de recambio que necesitan cada uno de ellos. Güemes ya jugó las tres fechas el mismo día que jugaban en la Primera Nacional, y Central como Mitre, lo hacen en forma continua, sin recargar la programación de la semana.
Después seguramente habrá cosas que mejorar para optimizar un buen nivel. Y lo que nadie dice ni escribe, es que la violencia no apareció en ningún escenario pese a la gran cantidad de público que hubo el fin de semana. Pero lo que hoy puede ser una felicidad compartida entre todos, en cualquier momento se podría disfrazar en un duro flagelo de nunca acabar, especialmente en el fútbol.
Hoy el recambio era necesario y la pandemia, que, en muchos casos, dejó sus graves secuelas, fundamentalmente en lo económico, en el fútbol de hoy cimentaron lo novedoso del aspecto dirigencial que optaron con buen criterio en gastar menos, y apostar a los chicos como una inversión a futuro.